Es importante que las empresas cuenten con un coach que le brinde apoyo a cada uno de sus empleados, ya que en algún momento todos sufrimos de estrés o de algún desgaste emocional que causa un desequilibrio, lo cual puede afectar a la productividad del empleado, impactando el desarrollo de la empresa.
Un coach ayuda a modificar el entorno de la persona y a realizar un cambio en su vida, reduciendo el estrés y ayudándolo a ver los problemas desde otra perspectiva. Además, pueden detectar las fortalezas y debilidades de cualquiera para ayudarlos a desarrollar su potencial.
Los temas que las empresas desean que los coaches traten con sus empleados son:
- Fortalecimiento del desempeño laboral
- Gestión de tiempo
- Desarrollo de habilidades comunicativas
- Diferente perspectiva de retos
- Desarrollo de habilidades de liderazgo
- Toma de decisiones
- Objetivos estratégicos
- Manejo del cambio
- Trabajo en equipo
Si la empresa desea crecer en dichos aspectos, lo recomendable es que contraten a un coach externo que ayude a cada integrante de la compañía a encontrar un equilibrio y a desarrollar su potencial.
Fuente: Revista Moi