Hay gente que cree que los distintos seguros que existen son un gasto, cuando la realidad es distinta: son una inversión. Muchas veces no usamos los seguros y qué bueno, pero cuando los necesitamos nos pueden sacar de grandes aprietos sin ponernos en otros.
Simplemente piensa, si no tuvieras seguro ¿serías capaz de pagar la cuenta del hospital si estuvieras en un accidente? o ¿de cambiar tu coche que fue pérdida total en ese choque? Como éstos hay muchos ejemplos de cómo los seguros nos apoyan en los momentos difíciles. Conoce más acerca de los distintos tipos de seguros existentes:
- Seguros de vida
Este seguro consiste en pagar una prima, que en caso de morir o llegar a un determinado plazo, tú o los beneficiarios pueden cobrarla. Es común entre los padres de niños pequeños, ya que de alguna manera los dejan asegurados si fallecen. También cuando los ingresos sólo recaen en un miembro, es buena idea asegurarlo para no dejar desprotegida a la familia.
- Seguro vehicular
Este seguro no sólo sirve para arreglar tu coche o el que chocaste, sino que también contempla la responsabilidad civil por daños a terceros, que es cuando por un accidente se afecta a un tercero, puede ser a una persona o a un bien; también nos ayuda a cubrir los gastos médicos, la defensa y asesoría jurídica, de ser necesaria.
- Seguros de gastos médicos mayores
Se trata de seguros que cubren los gastos que se derivan de una lesión o enfermedad. Cubren el costo de hospital, alimentos, análisis clínicos, honorarios médicos, intervenciones médicas, entre otros. Hay distintos planes que tienen diferentes coberturas, hay que revisar cuál satisface tus necesidades.
- Seguros educativos
Este seguro es más un plan de ahorro y sirve para garantizar la educación de tus hijos en un futuro, se ahorra una cantidad mensual que a determinada edad se le es entregada al menor para que realice sus estudios.
- Seguros de casa habitación u oficina
La naturaleza actúa de maneras inimaginables y muchas veces ocurren desastres naturales que afectan a las casas, puede ser hasta tal punto de desaparecerlas. También existen los accidentes y un incendio puede acabar con todo o sufrir un robo que deje vacía la casa. Por ello existen seguros que pueden protegerte en distintas circunstancias: en contra de robos, de desastres naturales, de incendios, aquellos que ven por los contenidos o por la estructura de la casa; éstos son sólo algunos ejemplos.
Un incidente te puede cambiar la vida en distintos ámbitos, como se vio en los tipos de seguros existentes. Lo mejor es que nada te suceda, pero por si acaso, es importante tener un seguro, que te permitirá sobrepasar ese momento difícil en el aspecto económico. Contratar un seguro es la mejor inversión que puedes hacer para tener un futuro brillante.
Con información de la Revista del Consumidor
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