En ciertas ocaciones las empresas promueven a un excelente empleado en vez de promover a un potencial gerente. El Principio de Peter tiene que ver con la jerarquía de la empresa, y presenta la idea de que los ascensos de puesto son la causa del estancamiento profesional de empleados competentes.
Los creadores de este término son Laurance J. Peter y Raymind Hull, autores del libro “The Peter Principle” en el que explican que un trabajador competente, una vez domine sus labores y por tanto sea ascendido a un cargo superior, experimentará un descenso en su profesionalidad que le llevará a ser incompetente en el nuevo puesto.
Si alguien es bueno en su trabajo, será promovido a un trabajo que exige habilidades diferentes. Si él también es bueno en el nuevo trabajo, será ascendido nuevamente, lo que requerirá otro conjunto de habilidades. Un día, él llegará a un trabajo para el que es totalmente inadecuado, y allí se quedará.
La inamovible estructura piramidal de las organizaciones implica que los buenos trabajadores ocupen puestos altos, donde muchas veces no son del todo productivos, y sentimientos como la insatisfacción y la frustración se apoderan de ellos, reduciendo así su rendimiento. Las promociones internas de trabajadores, en ocasiones no son del todo acertadas y provocan la existencia de peldaños defectuosos en la escalera jerárquica organizacional. Pues bien, si los puestos de toma de decisiones y alta responsabilidad están ocupados por alguno de estos empleados incompetentes, es evidente que las decisiones que se tomen, lejos de ser acertadas, causarán catastróficas pérdidas para la empresa.
Hace un año (febrero de 2018), los economistas Alan Benson (Minnesota), Danielle Li (MIT) y Kelly Shue (Yale) publicaron lo que podría ser la primera investigación empírica detallada del Principio de Peter. Los autores del artículo descubrieron que los mejores vendedores tenían más probabilidades de ser promovidos y se transformaban en gerentes terribles. Cuanto mejor habían estado en ventas, peor era el desempeño de sus equipos una vez que llegaban a un puesto directivo.
Además, las personas no fueron promovidas por comportamientos que pudieran parecer correlacionados con la capacidad de gestión, en particular, aquellos que colaboraron con otros no fueron recompensados por hacerlo. Lo que importaba eran las ventas, puras y simples. Sería mejor simplemente alentar a los vendedores estrella con bonos en efectivo en su lugar, y no promoverlos a puestos gerenciales donde demostrarán su incapacidad innata.
3 formas de combatir el Principio de Peter
Existen formas distintas para evitar caer en el principio de Peter y sortear ascensos improductivos en tu empresa:
- Reubicar a los empleados incompetentes: Buscarles un puesto de trabajo donde alcancen una alta productividad laboral , y premiar su rendimiento con incentivos económicos.
- Metodología If- Then: A través de esta metodología se propone que los ascensos laborales no sean automáticos. Para ello se establece un periodo de prueba en el que el candidato deberá demostrar su valía para ser merecedor del ascenso. Además, este deberá mantener un feedback constante con su superior, quien actuará como coach para la nueva posición del empleado.
- Abrir nuevas posiciones con la metodología If- Then: En este caso se utiliza la metodología If –Then para crear nuevos puestos de trabajo. Para ello es preciso que los trabajadores actúen como managers y sepan detectar áreas de trabajo sin explorar para convertirlas en nuevos puestos y nuevas posiciones dentro de la organización, fomentando así el crecimiento de la empresa.
Fuente: www.forbes.com.mx