Las empresas medianas recurren cada vez más a videoconferencias desde varios dispositivos, pues representa ahorros en viáticos y en equipos, lo que se traduce en una productividad. Se calcula que en 2014 el mercado global de esta tendencia sea de alrededor de 60 millones de dólares, y que el acceso desde un smartphone o tablet sea superado al que se hace desde el escritorio, de acuerdo a cifras proporcionadas a Excélsior por la firma Avaya.
En general, la videoconferencia, entendida como los equipos, los puntos finales, la infraestructura, la movilidad y la telepresencia inmersiva, ha crecido en México alrededor de 11 por ciento en los últimos años, dijo Luis Arturo Rosales, gerente de Desarrollo de Servicios Comunicaciones Unificadas y colaboración de la firma Alestra.
Sin embargo, son las videoconferencias relacionadas con la movilidad la que crece en mayor medida. Se espera que en América Latina la videomovilidad crezca 54 por ciento para el próximo año.
Los expertos coinciden en que sus firmas han visto incremento en sus clientes gracias a la mayor adopción de la tendencia Bring Your Own Device (BYOD), en la que los empleados pueden utilizar sus propios equipos para entrar a salas de conferencia virtuales.
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